El espacio físico y el uso de la tecnología para facilitar el trabajo colaborativo en la clase de ELE
Muchos de nosotros tuvimos un aprendizaje (al menos en la primaria y secundaria) donde la organización y el diseño del aula estaba estructurado para fomentar el trabajo individual con prácticas controladas la mayoría del tiempo. Actualmente, espero poder realizar el diseño del aula para propiciar un enfoque orientado a la acción que facilite el aprendizaje autónomo y colaborativo. Es precisamente con una buena disposición del espacio físico y la integración de la tecnología que podemos respaldar un aprendizaje autónomo que brinde oportunidades a los estudiantes para pensar y reflexionar acerca de lo que están haciendo o aprendiendo.
La disposición del mobiliario en conjunto con la integración de las TIC tiene que estar pensada para satisfacer los diferentes estilos de aprendizaje, ya que, de no se así, difícilmente podamos promover la comunicación e interacción entre los alumnos de forma significativa. Debemos pensar en el uso de mobiliario que facilite la movilidad, que sea multiuso, cómodo que permita disponer de tecnología accesible para todos los alumnos de forma efectiva y a su vez tanto educadores como alumnos puedan moverse o agruparse libremente (permita trabajar en grupos y en proyectos).
Como lo mencionan Göçen, Eral y Bücük, podemos hacer uso del espacio separándolo en áreas más pequeñas y abiertas (investigar, crear, presentar, interactuar, intercambiar y desarrollar). Estos espacios brindan al educador la posibilidad de facilitar el proceso de enseñanza aprendizaje integrando la tecnología con la metodología y favoreciendo el papel activo de los estudiantes (2020, p. 87). Llevar a cabo el diseño de las clases es un proceso que implica renovar, innovar y tomar decisiones en cuanto al tipo de instrucción que queremos llevar al aula. Asimismo, tomar en consideración nuestros alumnos sus necesidades, su nivel de competencia como aprendiente autónomo y las herramientas adecuadas que faciliten en nuestros alumnos el desarrollo tanto de sus competencias comunicativas como de las generales.
Fuente: elaboración propia a partir de Göçen, A.,Eral S.H., & Bücük, M.H. (2020)
Como apunta Ramos Álvarez, “los nuevos enfoques y metodologías que apuestan por fomentar el aprendizaje móvil y ubicuo requieren de la integración plena de las TIC y de Internet en el proceso de enseñanza-aprendizaje (2018, p. 3). En efecto, si queremos que los estudiantes se involucren en su aprendizaje debemos proveer herramientas que permitan conectar el espacio del aula con otros espacios y fuentes de conocimiento, por ello nuestras clases deben incorporar la tecnología y diferentes herramientas para apoyar este entorno creativo, colaborativo, y autónomo de trabajo.
El siguiente diseño de aula está inspirado en el diseño de la clase laboratorio del futuro.
1. En este espacio se da la posibilidad de empezar un proyecto. Puede contar con sillones móviles, grabadoras y computadoras con acceso a internet para facilitar la investigación.
2. En esta zona los estudiantes pueden crear su propio contenido con cámaras digitales, micrófonos, programas para editar podcasts y para la producción digital.
3. Esta zona facilita la interacción entre parejas o entre grupos colaborando en línea en plataformas tales como padlet, classcraft, o playposit.
4. En este espacio se pueden dar tutorías o trabajar de forma individual. Se cuenta con mobiliario flexible y tablets con conexión a internet.
5. Esta zona tiene mobiliario escalonado que facilita la presentación de los proyectos o la retroalimentación. Tiene una pantalla interactiva, proyector y acceso a internet para hacer uso de herramientas digitales como pretzi, poll everywhere, kahot, blendspace, entre otras.
6. Este espacio es amplio y el diseño permite trabajar en grupos pequeños o grandes, participar en foros, realizar evaluaciones (Socrative) o trabajar en break out romos para hacer recorridos virtuales.
A pesar de que se requieren muchos recursos (económicos, espacio, planeación y tiempo), con los que no todo el tiempo contamos en nuestros centros de enseñanza, espero poder integrar la tecnología y así traer material auténtico que permita llevar a cabo una tarea o actividad específica. Incorporar herramientas para desarrollar las diferentes actividades comunicativas de la lengua como la expresión e interacción a través de blogs y podcasts. Otras herramientas que motiven a los estudiantes, ya sea porque son interesantes o su uso representa un reto, tales como juegos en línea, la creación de audio y vídeo o la realidad virtual; otras herramientas que permitan mostrar las experiencias de cada alumno y generar espacios de discusión y reflexión, por ejemplo, foros, editoriales, mensajería instantánea, diarios de aprendizaje en línea y redes sociales. Muchos de estos recursos permiten incentivar e involucrar al alumno y así desarrollar no solo las diferentes actividades comunicativas de la lengua, pero también la competencia intercultural.
Acá dejo un video donde se muestran espacios innovadores para desarrollar el proceso de enseñanza aprendizaje, claro está, cuentan con bastantes recursos y esto no es el caso de todas las instituciones, pero puede servirnos como fuente de inspiración.
https://www.youtube.com/watch?v=uUisTKQFDho
Referencias
Göçen, A., Eral S.H., & Bücük, M.H. (2020). Teacher Perceptions of a 21st Century Classroom. International Journal of Contemporary Educational Research, 7(1), 85-98. DOI: https://doi.org/10.33200/ijcer.638110
Ramos Álvarez , A. (2018). Unidad didáctica 4. Habilidades docentes y gestión del aula de ELE
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